Plan México: aranceles en chino y manufactura gringa
La presidenta Claudia Sheinbaum respondió a la bravuconería de Donald Trump con firmeza… firmeza en la pluma para firmar un decreto arancelario para “castigar” las importaciones provenientes de China, específicamente del sector textilero, pero se antoja como la punta de lanza para aranceles en los distintos sectores manufactureros.
Junto a estos aranceles, la presidenta anunció un plan llamado “Plan México” el cual busca que nuestro país llegue a ser una de las 10 primeras economías del mundo, aumentar la producción nacional y que se alcance un 50% de insumos nacionales.
A grandes rasgos, este plan suena bien, se buscará fomentar el empleo y que los mexicanos consuman lo producido en nuestro país, muy patriota el asunto. Sin embargo, ¿qué es la producción nacional? ¿Quién gana y quien pierde?
Hace unos meses, los grandes industriales mexicanos, principalmente de la industria textil, mostraban su premura ante los aranceles anunciados por el ahora presidente Donald Trump, posteriormente, agradecían los aranceles y decían que eso “salvaría miles de empleos”.
Tomando la industria textilera como ejemplo, tenemos que el 95% del total de las empresas textileras son pequeños talleres con no más de 10 personas, sin embargo, no producen más del 6% del total bruto de la industria, mientras que las empresas grandes (más de 250 trabajadores), que representan el 0.3% del total de las empresas manufactureras, concentran el 50% del total bruto de lo producido por la industria. Es decir, las grandes ganancias las tienen los grandes empresarios, ¿quién lo diría?
No es nuevo que la gran burguesía ponga de pretexto a los pequeños propietarios y hable en su nombre para granjearse mayores ganancias, pero este caso evidencia muy bien hacia donde va el apoyo del Plan México: hacia quienes se va a beneficiar con los aranceles y quienes seguirán ganando en la “prosperidad compartida”.
Es decir, por un lado, los primeros ganadores serán los Estados Unidos quien, gracias a sus políticas bravuconas, logró que el gobierno de México aumentara el arancel para los productos chinos.
¿Qué tanto se afectará la importación? Al día de hoy la mayoría de las importaciones provienen de los Estados Unidos (el 46%), muy por debajo tenemos a Canadá con el 22% y después China con el 16%. China se ha convertido en el tercer socio comercial de nuestro país en cuanto a importación y el cuarto en cuanto a exportación así que será un golpe interesante para las relaciones comerciales mexicanas, golpe que recibiremos para seguir estando “en paz” con los imperialistas del norte.
Pero, digamos, que este golpe lo podemos revertir en mejorar las condiciones de vida para el pueblo mexicano mediante la creación de empleos y la producción propia, pero, al final, ¿quién es dueño de esa producción? O más bien de las ganancias de esa producción.
He aquí las 10 principales empresas manufactureras del país: General Motors de México, Grupo Bimbo, Stellantis México, Cemex, Ford de México, Toyota Motor de México, Coca-Cola FEMSA, Nissan Mexicana, Volkswagen de México y Arca Continental (también embotella Coca-cola).
Es decir, las grandes manufactureras “mexicanas” son empresas multinacionales de las cuales únicamente tres tienen dueños mexicanos, pero que para nada representan los intereses del pueblo mexicano y para muestra todo lo que ya se ha hablado en FRAGUA de los negocios y el daño que Bimbo le ha hecho a nuestro país y no mencionemos a CEMEX, empresa que es partícipe del apartheid y genocidio en Palestina y bueno Coca-cola simplemente es impresentable.
Entonces, ese “Plan México” y lo que quiere la presidenta que compartamos, en realidad no es más que el incremento de las ganancias de la gran burguesía trasnacional que, para colmo, la mayoría ni es siquiera mexicana; sino que son de los mismos imperialistas norteamericanos. La pugna arancelaria nos pone, una vez más, como saco de boxeo de los imperialistas y las respuestas “nacionales” solo fortalecen al gran capital.
Un verdadero plan sería fortalecer la industria nacional estatal, sería expropiar a todos aquellos que le han robado al pueblo, que han sido parte del expolio neoliberal y se han adueñado de la vida, sangre y ganancias del pueblo mexicano para tener una verdadera industria nacional al servicio del pueblo mexicano y no de los intereses del gran capital transnacional.
Mientras sigamos siendo “el patio trasero” de los imperialistas, nuestra economía seguirá dependiendo de los designios del gran capital monopolista transnacional y nuestra soberanía no será más que papel mojado. Es tiempo de que la prosperidad no sea compartida con los de siempre, sino que sea para el pueblo trabajador y explotado, el pueblo que con su trabajo mueve la producción. Es necesario que la prosperidad llegue a nuestros bolsillos y mejore nuestro estilo de vida y no sólo sean migajas que caen de la mesa de la burguesía y eso sólo será posible con una economía planificada, socialista, basada en el bienestar del pueblo y no de las empresas.
¡Contra el despojo, la represión y la explotación; organización, resistencia y lucha por el socialismo!
Correo: olep.contacto@gmail.com y olep.contacto@gmail.com
Facebook: https://www.facebook.com/olep.fragua
Instagram: https://www.instagram.com/olep_fragua/?hl=es-la
Sigue nuestra página de internet: olep.org.mx