El mito de la Izquierda y la Derecha en la política electoral mexicana
Colaboración
Utilizados para autonombrarse como la auténtica Izquierda y la cuarta transformación política de México, y todo lo demás ajeno a sus objetivos partidarios de MORENA como la Derecha. Pero, ¿realmente el presidente AMLO tiene una noción concreta de lo que es la Izquierda y cómo se diferencia de la Derecha? ¿Nosotros como clase trabajadora lo sabemos? Esto es importante a la hora de las movilizaciones partidistas, donde todos los candidatos a ejercer un cargo público buscan dar una imagen de cercanía con los trabajadores y sus intereses. Por ello, para no caer en sus redes, debemos tener claro qué son, cómo se definen a sí mismas y difieren la una de la otra, y si sus proyectos representan nuestros intereses.
El filósofo de La Rioja, España, Gustavo Bueno quien generó el sistema llamado Materialismo Filosófico, con una gran influencia marxista, nos ofrece quizá la mejor categorización de estas posiciones políticas en sus dos obras: el Mito de la Izquierda (2003) y el Mito de la Derecha (2008). Bueno señala que ambos conceptos no son una unidad sino categorías que dentro de sí tienen negaciones. Así la Izquierda ni la Derecha son unitarias sino de carácter irregular, heterogéneas. Demuestra que ambas se definen por su posición con respecto del Estado, y no por posturas basadas en teorías psicológicas, éticas-morales, antropológicas; críticas o apologías hacia la religión, el feminismo, la teoría queer, etc… A partir de esto, Bueno afirma que la Izquierda que defienda un proyecto político y económico racional-universal de Estado debe ser nombrada definida, porque busca modificar revolucionariamente la condición política y económica del territorio donde se busca aplicar. Es el caso así del marxismo que define un proyecto revolucionario con lo que se pretende hacer con el Estado. Se puede observar con naciones como la antigua Unión Soviética y la actual China donde se busca [buscaba en la URRS] elevar la clase nacional como proletariado en su totalidad, un cambio dialéctico pues se superan las contradicciones inherentes del modo de producción capitalista hacia el socialismo. En cambio, la Izquierda indefinida (divagante, extravagante y fundamentalista) no tiene un proyecto político-económico racional-universal con respecto del Estado, sino que, en general, buscan reformas para grupos específicos dentro del capitalismo, tal es el caso del colectivo LGBT+, feministas radicales, indigenistas, ambientalistas, etc., que incluso tienen una relación simbiótica con el Estado, pues éste les fortalece al mismo tiempo que estos grupos indefinidos lo preservan. Por lo que no buscan una superación de las condiciones de clase, la superación de la dictadura burguesa, sino agendas muy a su interés individual y/o colectivo particularista que no incluyen al resto de la nación, basados en ideas metafísicas o posmodernas.
La Derecha se define por su positividad con el antiguo régimen de unión de trono y altar, anterior a la Revolución Francesa. Defiende una sociedad dividida en clases o castas, por hechos de Dios, y no de los hombres; una religión oficial; el derecho natural; que una porción de la población deba mantener sus condiciones sociales para preservar los privilegios de la clase política y social dominante, como es caso de la nobleza. Por lo tanto, esta sería la Derecha alineada con el antiguo régimen, pues es reaccionaría a toda revolución de las Izquierdas definidas (comunismo, anarquismo, jacobinos, etc…) que buscan superarlo. Además, se agregan la Derecha no alineada con el antiguo régimen, como lo son el fascismo o nazismo, por mencionar algunos, que no buscan preservarlo, sino que son positivos hacia el Estado, incluso quieren fortalecerlo, buscando lograr sus objetivos irracionales, metafísicos, divinos e individualistas. Por último, existe la Derecha extravagante, por ejemplo, lo son los separatistas, libertarios, anarco-capitalistas, donde la unidad política soberana sea el individuo y no la nación.
¿Cómo podemos utilizar estas categorías para el caso de México, principalmente ante movilizaciones partidistas como las pre-campañas, posteriores campañas y elecciones? Pues observando de forma objetiva cuáles partidos, colectivos y movimientos se ajustan a las distintas formas de la Izquierda y la Derecha señaladas por Gustavo Bueno. En principio, podemos afirmar que no existe ningún partido electoral en México que sea de Izquierda definida, pues ni MORENA o el PRD que se afirman de Izquierda tienen un proyecto político-económico racional-universal que busque superar el actual régimen, mejor dicho, buscan hacerse de agendas de grupos de izquierda indefinida, para acrecentar la pequeña burguesía, pero manteniendo las condiciones precarias del proletariado al mismo tiempo que le son fieles a los intereses de la burguesía nacional e incluso extranjera, cercanos y obedientes a las políticas promovidas por los Estados Unidos. Ningún partido electoral representa los intereses de los trabajadores, no buscan revolucionar la nación ni abolir el modo de producción capitalista, manteniendo las condiciones de clase.
¿Existe una forma de Derecha reaccionaria con la revolución proletaria? Sí, pero muy particularmente en el caso de México, sin una gran carga ideológica como en el caso de Europa. Un ejemplo de esto es la desaparición forzada o asesinatos por parte del Estado hacia revolucionarios como Lucio Cabañas, Rubén Jaramillo, Genaro Vázquez o, por mencionar casos de actualidad, Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez del Ejército Popular Revolucionario EPR. Esto lo vimos en los gobiernos del PRI y el PAN, ambos Derechas extravagantes, y que, para el caso del actual gobierno, de Izquierda fundamentalista, se protege al ejército y su propio régimen pues temen la sublevación del pueblo trabajador para la instauración del socialismo, en potencia el comunismo.
Es de vital importancia la organización para la revolución, más allá de las urnas. Pues solo los trabajadores pueden lograrlo en unidad, como fuerza motriz y directriz, para romper sus cadenas.